Enseñanza y divulgación de las ciencias

El 10 de mayo la Escuela de Astronomía de Cali cumplirá 20 años de actividades continuas divulgando la astronomía y orientando a estudiantes, docentes e instituciones educativas interesadas en el tema.  Aprovechamos la proximidad de esta efeméride para recordar la posición que ocupa la divulgación científica en el contexto educativo y destacar su importante papel en la sociedad actual.

A primera vista la enseñanza de las ciencias y la divulgación científica parecen sinónimos porque sus intenciones son similares. Pero un análisis más detallado deja al descubierto que se trata de dos vertientes de la educación que en algunos aspectos se complementan, en otros se mezclan y en otros espacios se alejan.  Si bien la frontera que la separa es confusa, es claro también que se trata de dos actitudes educativas diferentes que conviven socialmente desde que la ciencia existe y el gran público se interesa por sus desarrollos.

El estado a través de la ley 115 de educación nacional reconoce oficialmente tres alternativas de educación a las que puede acceder el pueblo colombiano: educación formal, educación no formal y la educación informal. Cada una tiene sus propias dinámicas, sus propios métodos y está a dirigida a un público diferente.

Se entiende por educación formal la que imparten las instituciones oficiales y privadas en la modalidad de educación preescolar, básica, media y superior, ejecutadas por instituciones aprobadas por el ministerio de educación.  Jardines infantiles, escuelas, colegios, universidades e instituciones de garaje con licencia hacen parte de este abanico, todas impartiendo programas educativos sujetos a revisión estatal.

La educación no formal la desarrollan instituciones de divulgación o educación no supervisadas por el ministerio de educación y que tienen como objetivo “complementar, actualizar y suplir conocimientos y  formar en aspectos académicos o laborales”.  Pertenecen a este grupo las asociaciones de aficionados a las ciencias, museos, planetarios, bibliotecas y similares.

Por último la educación informal es la que encuentra el público en la cotidianidad e interacción social del día a día, en las reuniones sociales al escuchar a algún experto, en los medios de comunicación escritos, radiales o audiovisuales, internet, en las revistas y plegables, en las costumbres o en la observación analítica.

En virtud de la anterior catalogación el autor establece la enseñanza de las ciencias y la divulgación científica como dos vertientes paralelas de la educación que comparten la misión de fomentar el conocimiento científico entre la población general: la enseñanza de las ciencias asociada con la educación formal y la divulgación científica con la educación no formal e informal.  No es común, pero ocurre, que la educación no formal desarrolle actividades de enseñanza y en la educación formal se programen actividades de divulgación.  Nuevamente, la frontera entre ambas vertientes es confusa.

La enseñanza de las ciencias la imparten las instituciones educativas a través de programas con diferentes niveles de especialización, a estudiantes que superan grados de escolarización hasta alcanzar un título respaldado por el ministerio de educación. Se enseñan las ciencias naturales en los tres ciclos: preescolar, básica y media y su propósito es que los estudiantes comprendan el funcionamiento básico de la naturaleza a través de la física, la química, la biología y las matemáticas.  También se forman científicos en las carreras profesionales, especialmente en los programas de ciencias básicas.

Por otra parte la divulgación científica tiene como objetivo primordial aproximar a los individuos de todas las edades y niveles académicos con el conocimiento científico de vanguardia en sus diferentes expresiones, permitir que el público vibre con los conmovedores y audaces desarrollos  científicos y tecnológicos, que comprenda sus objetivos, su importancia, su desarrollo histórico, la trascendencia en la sociedad moderna y sus implicaciones.

Algunas diferencias notables entre ambas, además de las ya señaladas, se destacan a continuación.  La enseñanza  se basa en una pedagogía rígida, la divulgación es de carácter lúdico.  La primera cualifica, la segunda solo informa. Los docentes que enseñan son licenciados o profesionales, los divulgadores son en general aficionados a la ciencia. El público al que se enseña son estudiantes inscritos en alguna institución, la divulgación está dirigida al público del común. La educación es personalizada, la divulgación puede ser masiva. La enseñanza exige la adquisición de conocimientos, a la divulgación se asiste por amor al conocimiento.

Realizan programas de divulgación científica las asociaciones de aficionados a la ciencia, los planetarios y observatorios astronómicos, los museos y bibliotecas, medios de comunicación como radio, prensa y televisión, canales de ciencias y similares. Por otra parte, la divulgación científica presenta diversos formatos, los más populares son las conferencias, seminarios, diplomados, cursos, lecturas sobre temas científicos, conversatorios, documentales, cine del género científico, salidas académicas, talleres para niños y jóvenes, conformación de clubes y semilleros de ciencias, exposiciones de ciencias, portales de ciencias en internet, revistas de ciencias, libros de divulgación científica, notas periodísticas y muchas más.

Fomentar la divulgación científica y la educación en ciencias y estimular el vínculo enseñanza-divulgación debe ser una preocupación del estado, que debería iniciar con programas que impacten a docentes tanto en ejercicio como en formación, capacitarlos para comprender el discurso de la ciencia de frontera y sintonizarse con ella, educándolos más para divulgar que para enseñar.  Se trata de que los estudiantes disfruten con el conocimiento y no que simplemente lo aprendan, que se aproximen por asombro y no por  exigencia, que comprenda que “la ciencia también es divertida”. De esta manera tendremos una sociedad más crítica y culta, preparada para comprender y participar de la vida moderna y sus múltiples y apasionantes desarrollos científicos.